San Bernardo, estación ferroviaria de estirpe. Nació en el año 1857. Ahí llegó desde Alameda el primer tren, galopando sobre un largo esqueleto de rieles y durmientes montado en la dura cama de chancado extraído desde el río Maipo y trasportado en carretas tiradas por vigorozos bueyes, para dar forma a lo que sería el comienzo de una epopeya que se prolonga ya por más de siglo y medio. La Estación lugar de tantos recuerdos, testigo de adioses y bienvenidas, encuentros y desencuentros envueltos en sueños y esperanzas con gentes asomadas a las ventanillas en aquellos antiguos coches, vagones que invitaban a la aventura y a los sueños con locomotoras a vapor que jadeaban asmáticas, incansables arrastrando 15 o 20 carros acoplados unidos por muelas cadenas y mangueras y el peligroso tránsito de un coche a otro firmemente apoyados en metálicos pasamanos y la aparición intimidadora del personal de conductores que provocaba desasosiego y preocupación. El paisaje se abría ante asombrados pasajeros que iban y venían de todas partes, de día y de noche sin descanso. Cuanto cariño le tengo a esa estación que me vió nacer como funcionario ferroviario en una oficina de equipajes, en la boletería o en la cabina de movilización en que el rítmico compas del telégrafo me llenaba de ilusión, de sueños y de planes, junto a compañeros y colegas que se desvanecieron en el tiempo, en los recuerdos y en el olvido, pero que de vez en cuando nos asalta con sorpresas y nos advierte que aún existimos regresando como fantasmas. Por eso el día de hoy fue una fecha muy especial. Bajo el alero de ese andén tan familiar en compañía de otro colega ferroviario Héctor Ortíz Cancino en animada conversación recordándo a los que ahí laboraron tantos años atrás, con un atropello de nombres: El Jefe de Estación Raúl Valdivia San Juan, Jorge Letelier Araya, Delfín Reyes Zamora, el Macho Moncada, Pato Mora, el Ganso Loyola, Alaraco Pérez, el Quiltro Cáceres, el Nolo Venegas, Rubio, Silva, el loco Castillo, René Caroca Arenas, Navarro Bulo, Juanito Pardo, el cabezón Cerón etc. En eso estábamos.De pronto nos quedamos mirando a esa persona que avanzaba en compañía de una dama.Lo hacía lentamente Aún conservaba esa parsimonia que siempre lo distinguió. Alto y algo fornido, pero el paso de los años le había arrebatado parte de su antiguo porte,pero conservaba intacta su caballerosa estampa . Se nos quedó mirando,algo sorprendido. Un fuerte y prolongado abrazo, ahí en la estación ferroviaria bajo el andén añoso Por un momento sobraron las palabras. Era Rubén Cerda, al que cariñosamente llamábamos Huaso. Que gusto nos dió verlo. Volvieron los recuerdos y un millón de preguntas y respuestas se cruzaron.Al parecer nada y todo había cambiado, menos aquella forma de abrirse a las personas del colega Cerda que jubilado y todo permanecía fiel a su modo de ser y su manera de pensar con esa cautela que lo hizo tan respetado y querido. Ahí estaba el Huaso Rubén Cerda, ex-alumno del prestigioso Liceo de Hombres de San Fernando acompañado de su esposa Sanfernandina como él,la señora María Sánchez. En realidad fué un momento mágico en que volaban las preguntas con respuestas a medio terminar. Estábamos algo viejos, pero eso no era óbice para reactivar nuestros recuerdos." Huasito Rubén Cerda, espero verte de nuevo para terminar las preguntas, la inquietud y el ensueño.!"- Pronto apareció el Metro-Tren y se repitieron las despedidas,..... hasta cuando?...
Continuará.................
SAN BERNARDO--LA MAESTRANZA CENTRAL Y EL CERRO DE CHENA.-
10 de Abril de 2009
No es difícil encontrarse con antiguos maestrancinos, ferroviarios de tomo y lomo que por treinta o más años desarrollaron sus vidas y formaron sus familias en torno a la Maestranza Central de San Bernardo. Nacieron poblaciones ahí en la Calle Baquedano , con casitas de cemento coquetas y adornadas con antejardines que invitaban al reposo y tambien para cultivar flores y sueños y ver crecer a los hijos y a los hijos de los hijos. Una cuadras más al sur, por la Avenida Portales, otra hermosa Villa ferroviaria , entre las calles Nogales, 1º de Mayo,Maestranza, Industria, Progreso, Libertad, Barros Arana y Plaza Guarello. Aún conservan la típica construcción de la época, toda en albañilería de ladrillos, altas y señoriales. Pienso que ésta Villa debiera ser declarada patrimonio de la ciudad de San Bernardo, por su estilo, por la antiguedad y la belleza de su construcción, que albergó a tanta familia ferroviaria frente a la querida Maestranza Central, hoy convertida en elegante condominio con callecitas y parques adornadas con tropicales palmeras.
El Cerro de Chena que se observa al poniente de la Ciudad el que en su cumbre más alta ostenta un Pucará. Ahí en los faldeos del Chena se empezó a celebrar el "18 Chico"siendo sus fundadores los ferroviarios que por motivos de pago de sueldos que se cancelaban el último día hábil de cada mes no disponían de dinero el 18, razón ésta que los llevó a conseguir la celebración de las Fiestas Patrias el primer domingo después del pago. Estas celebraciones se hicieron famosas y hoy aún es posible ver en otras ciudades estas fiestas patrias que curiosamente se terminaron de hacer en San Bernardo con el término de la Maestranza que funcionó durante 75 años.- Bueno, como dijo Victor Domingo Silva..."Todo pasa, viento trágico y siniestro, nos usurpa lo que amamos, lo que es nuestro........" Continuara´....
EL DEPORTE EN SAN BERNARDO.- Domingo 12 de Abril de 2009.-
Clubes de fútbol, que representaban a barrios diferentes y a veces dos o tres en los mismos lugares con las reñidas disputas domingueras.En el sector de Plaza Guarello, barrio ferroviario destacaban el Torino de los hermanos Gómez, Juan, Oscar, Carlos, los hermanos Venegas, los Carrera. Rolando, José Miguel, el popular Pato Mora, el chileno Guerra y tantos otros cuyo recuerdo embarga mi corazón de sentimientos de afectos y nostálgica melancolía .El Isidora Valdivia, Rosa del Sur, Juventud Nacional, el Club América de corta duración y un poco más al oriente en la Avenida Portales entre 1º de Mayo y Nogales, frente a la Maestranza Central, el popular Vanguardia Unida y el Trotamundos en donde brillara Jaime Venegas un extraordinario jugador de medio campo. Al otro lado de la maestranza y más al oriente el Unión Baquedano de los Concha y >Chahuán. En el centro de la ciudad el Atlético Liceo y el Deportivo Liceo. Un poco más al poniente el Deportivo Eugenio Matte y el Oronza, además del Balmaceda y el Municipal. Pero el más importante en ese tiempo. década de los 50 el Maestranza Central que militó en la División de ascenso y que disponía de un hermoso estadio con una de las mejores canchas de pasto que en esa época existían en Chile. A mi memoria acuden algunos nombres de grandes jugadores sambernardinos: Grijalba, Mendoza, Eugenio Núñez, los hermanos Concha, el Pirula Valdenegro, que jugó en Colo Colo los hermanos Félix, Javier y Honorino Landa jugadores de Unión Española y de la selección Chilena y tantos otros que ni sé si aún existen.Olvidaba citar tambien al Deportivo Santa Marta que habitaba por ahí por el paradero 4o de la Gran Avenida. Hoy la mayoría de estos clubes han desaparecido pero sus nombres han quedado grabados en lo anales deportivos de San Bernardo y en la memoria de muchos antiguos sambernardinos que cada día disminuyen.-
El Básquetbol tuvo tambien su época de gloria. El Estadio San Carlos, que era un complejo deportivo pequeñito ubicado en la calle San José entre Barros Arana y J.J.Pérez. Grandes basquetbolistas y campeonatos se desarrollaron ahí : Blanca Carreño una de las más destacadas, jugó en la Selección de Chile y otras como Julia Herrera , María Lucila García, Eugenia Bustamante etc brillaron en esa canchita del Estadio San Carlos. Hoy ahí funcionan ferreterías,almacenes y otros negocios que han cambiado el paisaje, el entorno y los recuerdos para dar paso a la nostalgia y a los sueños.-
En la Estación Ferroviaria funcionó por muchos años el Gimnasio de la Maestranza con un Ring de Box en donde los peloduros de San Bernardo se daban con todo en memorables veladas pugilísticas en campeonatos de Barrio que dirigía y entrenaba don Filiberto Mery, que en su tiempo fuera un gran campeón chileno y sudaméricano.- Continuará ..........
DON JACOBO SCHAULSON Y EL PARTIDO RADICAL.-
14 DE ABRIL DE 2009.-
En memoria de Octavio Seguel........
Era estudiante entonces y mi única preocupación era el deporte, especialmente el fútbol, pero un día cualquiera y sin proponermelo fuí abordado por un vecino años mayor que yo. En un lenguaje que había desarrollado en su frecuente contacto con políticos me explicó que ese día en la noche el partido Radical tendría una concentración en la plaza de armas de San Bernardo con la presencia del Senador Jacobo Schaulson, según Seguel una de las más destacads figuras políticas del país y que estaba reuniendo jóvenes para una contramanifestación. Le hice caso y muy pronto éramos algo así como 20, que no teníamos idea del asunto, pero ahí estábamos, listos como un boy scout. De la calle Juanita de Aguirre entre Barros Arana y Libertad en donde vivía el Loco Seguel, ya que así era conocido salimos como a las 8 de la noche, todos vestidos de negro negro portando un ataúd fabricado de cartón y los acompañantes todos con una vela encendida en su mano. A mi y a mi amigo Darío Ríos se nos encomendó lucir un lienzo. Había llegado Don Jacobo y en una tarima ubicada en la plaza frente a la calle Ohiggins sede del Partido Radical, le hablaba a la ciudadanía. Entramos silenciosamente por calle Freire en un tétrico desfile portando el ataúd pintado de negro acompañando el fúnebre cortejo. Darío y yo desplegamos el lienzo que decía " Aquí Yace el Partido Radical" ante la estupefacción y la sorpresa de todos de los simpatizantes de Don Jacobo que eran muchos. Aparecieron los carabineros por todos lados y nos sacaron la cresta a palos. Abandonamos todo para ponernos a salvo y más de alguno fue capturado Todo por culpa de mi gran amigo, Octavio Seguel, el loco Seguel (Q.E.P.D.) Aún hoy al recordarlo me duele la espalda.-
